Mirar la hora en un reloj parece ser simple, solo ver hacia donde apuntan las manecillas.
Pero, ¿qué pasa cuando hay una forma más artística de medir el tiempo? Aquí entran las horas saltantes. Es una complicación exclusiva de la alta relojería en donde la hora aparece en una ventanilla por medio de un disco giratorio, en lugar de una aguja.
Es en este tipo de guardatiempos, en donde el diseño de la esfera comienza a cambiar; la tradicional aguja desaparece, y la hora se empezará a leer en una pequeña abertura llamada ventanilla.
La pieza se basa en un concepto que fue desarrollado en 1822 por el ingeniero austriaco Josef Pallweber, que creó una exhibición de relojes del bolsillo que utilizaba números en los discos giratorios, además de las agujas clásicas. Desde los años 20, es un mecanismo que se usa cada vez más en los relojes de pulsera.