El Montblanc 1858 Geosphere 0 Oxtgen celebra el 80 cumpleaños de Reinhold Messner, el alpinisita y Mark Maker de la maison.
Se trata de una edición limitada de 290 unidades, un número que hace referencia a los 29 031 pies de altura de la montaña más alta del mundo, que Messner coronó en varias ocasiones.
La pieza tiene una caja de titanio ligero y pulido con una dimensión de 44 mm, dotada de un bisel bidireccional con acabado cerámico estriado en negro y los puntos cardinales.
La esfera con el patrón de glaciar en rojo sfumato, inspiradas en las grandes masas gélidas de ese color ubicadas en la Antártida, plasma la textura del hielo con su intrincada estructura decristales, helados desde hace miles de años.
El reloj presenta complicaciones como el segundero central, un contador de 30 minutos en una subcarátula a las 3 y otro de horas a las 9.
El pulsador de inicio/parada seencuentra en las 2, mientras que el botón de reinicio está en las 4.
El cronógrafo cuenta con una función que indica todas las zonas horarias con sus globos giratorios para los hemisferios norte y sur, una escala de 24 horas, un indicador de día/noche y la fecha mediante un disco.
El reloj cuenta con una correa textil intercambiable de color negro con un detalle de costuras rojas que recuerda los maravillosos e insólitos glaciares rojos, un fenómeno tan excepcional como este extraordinario explorador.
Montblanc 1858 Cronógrafo Geosphere 0 Oxygen: oxigeno cero
El Montblanc 1858 Cronógrafo Geosphere 0 Oxygen es una edición limitada que se ha elaborado de una forma especial, sin oxígeno en el interior.
Este mecanismo ofrece numerosos beneficios para los montañistas que necesitan que su equipo funcione en perfectas condiciones en los climas más extremos.
La ausencia de oxígeno dentro del movimiento no solo evita el empañamiento, que puede producirse a causa de los drásticos cambios de temperatura, sino que también previene la oxidación. Cada reloj se entrega con un certificado de oxígeno cero, que acredita esta tecnología invisible.
El reverso de la caja revela un grabado único de colores de la cumbre K2. La imagen utilizada proviene de las fotografías que el mismo Messner sacó desde la cima durante su primer ascenso, en 1979. El K2 es su cumbre preferida entre los 14 ochomiles. En ese día concreto, el tiempo era perfecto, lo cual le permitió observar hasta una distancia de 200 km.
Permaneció sentado allí unos momentos, admirando la belleza del paisaje, y captó
este instante con su cámara antes de comenzar el descenso. Ahora, este momento se ha
plasmado para la eternidad en el reverso de la caja gracias a la técnica de grabado a láser en3D de Montblanc.
La imagen, fiel a la fotografía original, se ha creado mediante un complejo
proceso de oxidación generado por láser, que crea un relieve tridimensional estructurando el metal con acabados mate y brillante para potenciar el contraste